Mitos y Leyendas de Chiloé
La mitología chilota se formó a partir de la mezcla de antiguas religiones de los pueblos indígenas (chonos y huilliches) que habitaron esta zona, y de las leyendas y supersticiones traídas por los conquistadores españoles que, en 1567 comenzaron el proceso de conquista en Chiloé, y con ello el inicio de la fusión de elementos o sincretismo que formarían una mitología propia.
Esta mitología creció y prosperó, al mantenerse muy aislada de otras creencias y mitos que se desarrollaron o existían en Chile, debido al aislamiento que sufrió el archipiélago al quedar separado del resto de las posesiones españolas en Chile, cuando fueron abandonadas o destruidas por los mapuches todas las ciudades entre el río Biobío y el canal de Chacao, después del desastre de Curalaba en 1598.
Jerarquía de criaturas mitológicas
El rango más alto correspondería a Tenten Vilu y Caicai Vilu, quienes en una lucha legendaria y titánica, crearon el Archipiélago. Más abajo de Caicai Vilu estaría el Millalobo como Rey de los mares, junto a su mujer la Huenchula y los tres hijos de ambos, el Pincoy como el príncipe de los mares, la Pincoya y la sirena chilota como princesas; quienes lo ayudan en la tarea de manejar los mares. Luego el Millalobo otorgaría diferentes rangos menores a distintas criaturas mitológicas marinas.
Las criaturas terrestres no poseen una jerarquía.
Seres humanos en la mitología
A ciertas personas se les atribuyen poderes mágicos. Existe la creencia en brujos, quienes poseen la capacidad de volar y tendrían bajo su mandato a varias criaturas tales como el Invunche. Además se recurre a machis, persona que desempeñan un rol importante en la cultura y religión mapuche, pero que en Chiloé tienen características y funciones parcialmente diferentes.